Recordando las peliculas que de niño veia me acordé de esta que cuando la vi por vez primera no pude dormir del miedo, jajajaja...., en esos tiempos las peliculas de terror eran otras... estas si te hacian dar miedo. "Carol Anne.....Carol Anne...".
Bueno se habla de esta película de muchos mitos en los cuales la protagonista murió y muchos otros que trabajaron en este film murieron de una manera misteriosa.
También conocida como Juegos diabólicos, encierra sucesos increíbles durante la grabación de su trilogía. Dominique Dunne, actriz que interpretaba a la hija mayor en la primera parte de la película, fue brutalmente asesinada por su novio. Asimismo, cuando se planeaba comenzar a rodar la segunda parte, el actor Julian Beck murió de cáncer en el estómago.
Para la última parte de la trilogía, Heather O`Rourke, de 13 años y quien participara en las tres películas, murió a punto de finalizar la cinta de algo que los médico diagnosticaron como “shock séptico”; momentos antes de su muerte, sufrió dos paros cardiacos, algo muy raro para alguien de su edad; fue reemplazada con una doble.
La energía negativa persiguió a las tres entregas de esta historia de terror en la que niños eran atacados por unos extraños seres a través de la señal del televisor.
En 1
982 se estrenó la primera parte de la saga y, tras el éxito de la producción, parecía que la actriz Dominique Dunne tendría un futuro prometedor. Pero se le ocurrió involucrarse con un tipo psicópata que luego de convertirse en su ex novio la atacó en su casa, la arrastró a la calle y luego la mató estrangulándola.
Pero como no hay duelo que dure eternamente, los productores decidieron seguir adelante con las secuelas y en 1986 esperaban estrenar la segunda parte, que sería protagonizada por Julian Beck. Sin embargo, el actor fue diagnosticado con cáncer de estómago y ni siquiera alcanzó a grabar una escena.
En ese momento todos asumieron que no se trataba de hechos aislados y, por seguridad, exigieron se realizara un exorcismo en el set.
Al parecer eso no fue suficiente y en 1988, durante la filmación de la tercera entrega, la pequeña actriz Heather Orourke fue internada de urgencia y murió sin saberse completamente las causas. Y como no había dinero ni tiempo que perder, la cinta fue terminada con una doble, pese a que además la actriz Zelda Rubinstein también debió apartarse del proyecto a raíz de la muerte de su madre.
Bueno se habla de esta película de muchos mitos en los cuales la protagonista murió y muchos otros que trabajaron en este film murieron de una manera misteriosa.
También conocida como Juegos diabólicos, encierra sucesos increíbles durante la grabación de su trilogía. Dominique Dunne, actriz que interpretaba a la hija mayor en la primera parte de la película, fue brutalmente asesinada por su novio. Asimismo, cuando se planeaba comenzar a rodar la segunda parte, el actor Julian Beck murió de cáncer en el estómago.
Para la última parte de la trilogía, Heather O`Rourke, de 13 años y quien participara en las tres películas, murió a punto de finalizar la cinta de algo que los médico diagnosticaron como “shock séptico”; momentos antes de su muerte, sufrió dos paros cardiacos, algo muy raro para alguien de su edad; fue reemplazada con una doble.
La energía negativa persiguió a las tres entregas de esta historia de terror en la que niños eran atacados por unos extraños seres a través de la señal del televisor.
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982 se estrenó la primera parte de la saga y, tras el éxito de la producción, parecía que la actriz Dominique Dunne tendría un futuro prometedor. Pero se le ocurrió involucrarse con un tipo psicópata que luego de convertirse en su ex novio la atacó en su casa, la arrastró a la calle y luego la mató estrangulándola.Pero como no hay duelo que dure eternamente, los productores decidieron seguir adelante con las secuelas y en 1986 esperaban estrenar la segunda parte, que sería protagonizada por Julian Beck. Sin embargo, el actor fue diagnosticado con cáncer de estómago y ni siquiera alcanzó a grabar una escena.
En ese momento todos asumieron que no se trataba de hechos aislados y, por seguridad, exigieron se realizara un exorcismo en el set.
Al parecer eso no fue suficiente y en 1988, durante la filmación de la tercera entrega, la pequeña actriz Heather Orourke fue internada de urgencia y murió sin saberse completamente las causas. Y como no había dinero ni tiempo que perder, la cinta fue terminada con una doble, pese a que además la actriz Zelda Rubinstein también debió apartarse del proyecto a raíz de la muerte de su madre.
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